Situada en el norte de Brasil, la ciudad de Manaos (Manaus en portugués) se alza como una de las localidades más importantes del país. Es la capital del estado Amazonas y, al estar localizada en medio de la selva, te brindará de unos paisajes exóticos inigualables y reservas naturales sin fin. Sin dudas, vivir en Manaos en una experiencia que merece la pena probar, pero atendiendo también a los numerosos inconvenientes que conlleva.
Ventajas de vivir en Manaos
La ciudad posee cientos de sitios de interés, como un zoológico que está ubicado ¡justo en medio de la selva! De igual manera hay museos, espacios culturales y playas que seguro te quitarán el miedo a salir de tu zona de confort para poder adentrarte en una nueva aventura.
En esta ciudad tendrás una de las mejores experiencias culinarias. Si te gusta el pescado definitivamente este es el lugar indicado para ti, ¿por qué no pruebas el tambaqui asado? Una carne rica en proteínas y sales minerales.
La palabra “hospitalidad” es la perfecta descripción de Manaos. Si estás perdido y necesitas indicaciones, los habitantes de la ciudad estarán encantados de ayudarte en la medida que les sea posible. Son personas cálidas, afectuosas y colaboradoras.
¿Buscando empleo o la oportunidad de montar tu propio negocio? Las probabilidades de crecimiento empresarial en Manaos son indiscutibles; solo necesitarás planificar un poco y podrás tener el mundo a tus pies. De igual manera, el comercio es el punto fuerte de su economía, gracias en parte a los muchos supermercados y comercios de calle.
Manaos posee una belleza arquitectónica inigualable. El Ciclo del Caucho le proporcionó a la ciudad una época de extrema riqueza, y todas las construcciones hechas en ese período nos dan testimonio de ella. Sin embargo, esto no solo se remonta al pasado: la arquitectura moderna también está bien estructurada. Te aconsejo ir al barrio de Ponta Negra, una de las más famosas localidades del lugar.
Desventajas de la vida en Manaos
La reputación de Brasil suele inclinarse hacia la palabra “peligroso”, y sí que es verdad que Manaos tiene problemas asociados con la delincuencia, pero tomando ciertas precauciones podemos prever malas experiencias. En los terminales y en los lugares con mucho flujo de turistas, existen algunos riesgos, y es recomendable tener cuidado con tus objetos de valor.
Antes de viajar a Manaos recuerda contratar un seguro médico. ¿Por qué? Pues porque los servicios médicos allí pueden tener un precio muy alto para los extranjeros, sin mencionar que son algo deficientes, debido a que la ciudad cuenta solo con tres hospitales privados que tienen que atender a las decenas de miles de habitantes que residen aquí. De igual manera, infórmate con tu médico de confianza sobre las enfermedades a las que puedes estar expuesto al viajar al Amazonas. ¡Cuidado con la malaria! Hay riesgos de contraer dicha enfermedad.
El rápido crecimiento de Manaos condujo a la pérdida de sus áreas verdes; la biodiversidad que podíamos encontrar hace mucho en el Amazonas fue disminuyendo. Pero no te preocupes, el gobierno de Brasil ha implementado ciertas medidas para que el desarrollo de la economía vaya de la mano con la protección del medio ambiente.
Las calles son muy estrechas (algunas no están ni siquiera asfaltadas) por culpa de la mala planificación de la ciudad. El paso de los autos se dificulta, por eso los conductores suelen aparcar donde les pille más a mano (normalmente justo en el medio de la calle). Incluso se ven muchos casos de conductores que giran en las pistas en las que se tiene que ir recto, bloqueando así el paso por completo. ¡Qué inconscientes!
Por último, pero no menos importante, hay que apuntar que el calor es casi insoportable. Podría decirse que en Manaos solo hay dos estaciones (verano e invierno), pero parece que hay más verano que invierno. De igual manera, por la cercanía con el Bosque Amazónico, el clima tiende a ser muy húmedo y caluroso.
Toca ver cuál es el costo de vida en Manaos:
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Soy argentino y fui 4 veces a Manaus. La ciudad me encanta. Pude hacer excursiones muy lindas y la comida es muy buena . El tambaqui asado es delicioso. Obvio que hay barrios más peligrosos, como en todos lados, pero nunca tuve ningún problema tomando ciertos recaudos. Hace mucho calor todo el año, así que no lleven nada de abrigo, solo lo usarías en el cine del shopping je. La gente es muy cordial. Es una ciudad diferente y vale la pena visitarla.