Vivir en Vitoria

Vitoria es una bellísima ciudad del País Vasco, tal vez injustamente desconocida debido a la belleza de San Sebastián, o a la importancia naviera y la reconversión de Bilbao. Pero es una ciudad encantadora, y si decides vivir en Vitoria, has de saber que aunque se trata de una urbe cien por cien industrial, también es una de las ciudades con más entorno natural en su casco urbano y alrededores, además de limpia y muy bien cuidada.

Vitoria Gasteiz es un paraíso natural en mitad de la ciudad. Todas sus avenidas, calles y plazas están arboladas, hay hermosos parques y se disfruta de un magnífico cinturón verde con los parques de Armentia, Zabalgana y Salburua, lo que convierte a esta urbe en un gran balón de oxígeno para sus residentes.

Se trata de una ciudad tranquila, con unos 220.000 habitantes, muy elegante y señorial, dedicada, fundamentalmente a la industria, y según datos del INE, es la segunda ciudad de España, después de Burgos, en poderío industrial. Esto implica que hay mucha oferta de empleo en los sectores industria y servicios, y según los mismos datos, es de las ciudades que menor desempleo registra tanto en el país como en la región.

Vitoria goza de un magnífico trazado urbanístico, la ciudad ha sabido crecer en armonía, a lo largo de las décadas, ofreciendo todos los servicios de ocio, comercio y gastronomía. Además, en los últimos años, el Ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz ha llevado a cabo la construcción de centros cívicos en los diversos barrios de la ciudad, con instalaciones culturales y deportivas para los vecinos, y a precios simbólicos.

La población disfruta de una gran vitalidad y sigue en crecimiento, gracias a la Sede del Gobierno Vasco, ubicada en Vitoria, y al desarrollo de la Universidad del País Vasco, lo que dota a la ciudad de un cada vez mayor ambiente estudiantil.

Además, merece mucho la pena darse un paseo y visitar el casco antiguo, el recinto amurallado del Casco Viejo, y las calles y callejuelas, que conservan aún los nombres y fachadas de las antiguas tiendas del siglo XIX, reconvertidas en negocios más modernos (Calles cuchillería, herrería, correría, zapatería, etc.). La Iglesia de San Miguel, la hermosa y neoclásica Plaza de España, el frondoso y espectacular Parque de la Florida, forman un conjunto muy interesante, digno de visitar.

No podemos obviar tampoco la maravillosa gastronomía vasca, y la gran oferta de restauración, con sus internacionalmente famosos pintxos en restaurantes, bares y las célebres sidrerías vascas, que inundan la ciudad.

Desventajas de la vida en Vitoria

Tener gran calidad de vida, en el caso de Vitoria, cuesta dinero, y este es uno de los grandes inconvenientes de vivir aquí. Se trata de una urbe bastante cara en relación con otras ciudades de España a todos los niveles: cesta de la compra, servicios públicos y sobre todo, mercado inmobiliario. Por menos de 650 euros al mes, es posible que no encontremos nada razonable para alquilar.

Por otra parte, los impuestos municipales resultan algo más elevados en Vitoria que en otras poblaciones, incluyendo el temido IBI. Aunque lo cierto es que para disfrutar de la calidad de vida que se respira en la ciudad: limpieza, buena iluminación, parques cuidados al milímetro… hay que rascarse el bolsillo, eso sí.

Sin embargo, el principal inconveniente para quienes procedan de otras autonomías, es la imposición del Euskera a todos los niveles. Entre ellos encontramos el empleo público, los colegios, los institutos y las universidades, lo que afecta en gran medida a los trabajadores y las familias cuyos hijos se verán obligados a pasar por la inmersión lingüística obligatoria.

Para quienes no estén acostumbrados al clima frío, gris y lluvioso durante la mayor parte del año, este puede ser uno de los grandes hándicaps para poder adaptarse a Vitoria.

Ahora vamos a hacer un recorrido por las calles de Vitoria, mientras descubres algunos secretos escondidos de la ciudad:

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